Facts del sol y tu piel

Nuestro cuerpo está diseñado para beneficiarse del sol. En tanto la luz solar contribuye a mantener nuestros patrones de sueño, podemos permanecer despiertos durante el día y dormimos por la noche.

¿Cómo afecta el sol a nuestra piel?

Nuestro cuerpo está diseñado para beneficiarse del sol. En tanto la luz solar contribuye a mantener nuestros patrones de sueño, podemos permanecer despiertos durante el día y dormimos por la noche. Por otra parte, la forma en que nos exponemos al sol, tiene una enorme relevancia: la baja exposición, sobre todo durante el invierno, puede hacer que algunas personas se vuelvan propensas a cierto tipo de depresión conocido como trastorno afectivo estacional. En este sentido, el sol mejora nuestro ánimo, ya que promueve la producción de serotonina, un neurotransmisor que actúa en el cerebro regulando el humor. Además de lo que ya mencionamos, la luz solar ayuda a que la piel produzca vitamina D, muy necesaria para la calcificación normal de los huesos.

No obstante, como todos sabemos, la luz del sol también puede provocar daños. Por ejemplo, la exposición constante a los rayos UVB puede producir quemaduras. A su vez, los rayos UVA pueden penetrar la piel mucho más profundamente que los rayos UVB, pudiendo alterar muchos procesos de crecimiento y regeneración celular. Por lo que, independientemente de que un tipo de rayo UV penetre más que el otro, ambos pueden provocar daños a la salud y la piel. Algunas de las principales consecuencias a que puede dar lugar la exposición a los rayos solares sin protección son las siguientes:

Pérdida de elasticidad en la piel
Aparición de manchas y arrugas
Cáncer de piel (aparición de melanomas)
Desarrollo de alergias solares

Con el transcurso del tiempo, la exposición desmedida a los rayos solares puede reducir considerablemente la elasticidad de la piel; incluso, ésta puede engrosarse, arrugarse o afinarse como papel. La piel ha desarrollado ciertos mecanismos para prevenir o reparar el daño causado; por eso, la capa más externa de la piel se despoja constantemente de las células muertas y se regenera.

Aunque parezca repetitivo, es importante que recuerdes que debes conocer los riesgos a los que conlleva la exposición al sol sobre nuestra piel. Ello te permite buscar herramientas para prevenir futuras enfermedades. Una de las principales herramientas con las que puedes proteger tu piel es el uso de bloqueador solar todos los días, incluso los nublados.

Pero, no todo es malo. El sol es indispensable para la vida, lo que significa que es muy importante para el organismo humano. Entre sus beneficios, destacan:

Mejora la respuesta muscular
Disminuye la presión sanguínea
Incrementa nuestra respuesta inmunológica
Reduce las infecciones respiratorias
Estimula las terminaciones nerviosas
Promueve la síntesis de vitamina D para calcificar los huesos

Nuestro primer contacto con los rayos solares se produce a través de la piel. Por lo que, te proponemos algunos consejos que debes tener en cuenta al realizar una rutina de skincare.

Limpieza y preparación

Cuando hace calor, nuestro cuerpo suda. Ello genera humedad y, en ocasiones, ésta puede provocar infecciones o dermatitis en ciertas zonas de la piel. Para evitar imperfecciones, es conveniente comenzar el día con una rutina suave que elimine la suciedad sin alterar la cubierta ácida de la piel.

Hidratación

Durante la época de calor es importantísimo hidratar nuestra piel, tanto de forma externa como interna. La falta de agua y la deshidratación de la piel llevan a que ésta adquiera un aspecto seco, apagado e incluso descamado. Bañarnos y beber agua abundantemente pueden prevenir la deshidratación. Asimismo, para lograr una hidratación adecuada es imprescindible seleccionar cremas o sérums de textura ligera, que contengan activos concentrados, por ejemplo, ácido hialurónico y diversos extractos botánicos. Además, la presencia de estos componentes en la crema hidratante, beneficia aún más la hidratación y hace más fácil hacer frente a los efectos nocivos de la contaminación.

¡PROTECTOR SOLAR!

Recordemos que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo. Tiene la función de protegernos de agentes externos que pueden causarnos daño. No olvidemos que la piel desempeña importantes cometidos en nuestro organismo, por eso es fundamental cuidarla a fin de evitar cualquier alteración en ella. El uso de protector solar facial y corporal diariamente es nuestro mejor aliado para prevenir arrugas, manchas en la piel y otros tipos de enfermedades cutáneas. Recuerda aplicarlo siempre antes de salir, si puedes dos veces al día.